En este libro se narra la vida de una mujer, Yerma, cuyos sueños se ven colmados de felicidad con ese niño que jamás podrá engendrar. Ella lo desea, siente que sus brazos están vacíos y que su cuerpo tiene la consistencia de un tronco marchito, reseco. También advierte que los años transcurren y ella continúa deseando a ese hijo que jamás podrá concebir. Lo intenta todo, pero la causa real de su infecundidad es su esposo: un individuo que sólo desea atenciones y quien durante varios años la ha traicionado. Cuando Yerma se entera, cuando se da cuenta de que todos sus sueños se derrumban, lo asesina.