En La vida es sueño, obra filosófica del español Pedro Calderón de la Barca, Basilie, rey imaginario de un país de Europa, predice –luego de consultar algunos horóscopos- que tendrá un perverso hijo que lo despojará del trono y dejará en la ruina a esa nación. Para evitar estos daños, el monarca manda encerrar a su hijo en cuanto nace. Así, Segismundo –hijo del soberano- es encadenado en una especie de calabozo donde crece como un animal feroz, aborrece la vida y anhela desconsoladamente esa libertad con que se deleitan hasta las criaturas irracionales.